"De visita en Neuchâtel decidimos parar para comernos una crepe. Nos sentamos y después de estar 30 min esperando a que la camarera venga, me decido a ir directamente a la barra, pensando que a lo mejor hay que pedir ahí. Pero NO!...me dice que hay mucha gente y que me vendrá a pedir la comanda en 10 min que al final son 20min...después de 1h, desde que nos hemos sentado, aparece la camarera. Nos pide nota, y al cabo de 20min nos trae las dos bebidas que habíamos pedido...y después de 30 min las 2 crepes. Decidimos pedir otra crepe, y después de 40min nos dice que se han olvidado y que la van a hacer. A la hora, nos vuelve a decir que se han vuelto a olvidar. Decido ir a pagar, y encuentro nuestras crêpes a la espera de que alguien nos las traiga.Resumen: para comernos 3 crepes, hemos estado casi 4h....VERGONZOSO"